Nota realizada por el Prof. Jorge Olguín.
Comentario: Escribo para
aclarar el
tema de la verdad en ambas mentes, la reactiva y la analítica. Un profesor de la anterior técnica
conoce cómo actúa cada
mente.
Es importante aclarar el funcionamiento de la mente reactiva
y la mente analítica. Si una mujer
tiene un engrama cuyo
contenido verbal es: "Todos los hombres son
pervertidos"
(hay mujeres que están llenas de
ese tipo de engramas),
razonará sobre esta base y como no sabe de dónde proviene
esta idea sobre los hombres (no puede
saberlo porque el
engrama entra subrepticiamente en la
mente reactiva, es
decir, no pasa por la mente consciente o analítica), tiene que
computar o razonar forzosamente con esa idea.
¿Qué hace entonces? Racionaliza o justifica
de cualquier
manera la idea (reactiva
y por lo tanto irracional,
obviamente) de que todos los hombres son pervertidos.
¿Y qué sucede si esa mujer no tiene absolutamente nada
en
contra de los hombres y muy por el contrario siempre se han
portado bien con ella? Pasa que ella entonces los
aprecia.
Naturalmente, allí se está produciendo un
conflicto, pues
tiene que computar necesariamente con ese engrama que le
dice que todos los hombres son unos pervertidos. Entonces
inventa un motivo para que no haya conflicto. Por ejemplo:
"Todos los hombres son pervertidos y
a mí me trataron
bien porque seguramente quieren
acostarse conmigo".
Esto se ha visto siempre
en las sugestiones hipnóticas:
cuando a una persona se la hipnotiza y se le
da una orden
completamente idiota, como sacarse las medias y colgarlas
de la lámpara cuando despierte, la persona
lo hará, pero
justificará de alguna manera esa actitud idiota:
-Me voy a
sacar las medias porque hace mucho calor aquí y las colgaré
de la lámpara porque allí se les va a secar la humedad que
traían.
La justificación o racionalización de las actitudes llamadas
irracionales, impulsadas por los engramas reestimulados es
una constante de la dramatización.
La persona que dramatiza un engrama cree sinceramente que
sus ideas parten de su libre razonamiento, ya que si descubre
que su idea proviene de un engrama, el mismo se libera de
esa carga y no afecta más a esa persona.
En la anterior técnica existe una técnica llamada
Auditación, que
tiene la clave de llevar a la persona hasta el suceso donde
se grabó la orden hipnótica y que concientemente
examine el contenido del engrama, en cuyo caso
se efectúa una
duplicación y, por una ley física, se produce de esa manera
una desaparición (el ejemplo de la línea de lápiz a
la que se le pasa una goma de borrar). De esa forma la
persona queda clear o libre de engramas.
Pero volviendo a lo que se dice,
si el engrama es una
orden hipnótica, la persona engrámica no miente ni dice la
verdad, simplemente actúa irracionalmente.